Se inician los trámites para declarar BCIL a la Harinera de Castelló d'Empúries

La declaración como Bien Cultural de Interés Local (BCIL) es una figura de protección para los bienes inmuebles que integran el patrimonio cultural catalán y está regida por la Ley 9/1993, de 30 de septiembre, del patrimonio cultural catalán.

  • Sala de molinos
30 de marzo de 2023

El Ayuntamiento de Castelló d'Empúries ha iniciado el expediente para declarar la Farinera de Castelló d'Empúries como BCIL. Los bienes inmuebles declarados BCIL pasan a formar parte del Catálogo del Patrimonio Cultural Catalán del Departamento de Cultura por su significación e importancia. Son bienes que deben ser preservados y mantenidos como identificadores del municipio dado su valor histórico, artístico, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, etnológico, documental, bibliográfico, científico o técnico. Esta preservación tiene por objetivo que puedan ser disfrutados por la ciudadanía y puedan ser transmitidos en las mejores condiciones a las futuras generaciones.

Los municipios mayores de 5.000 habitantes tienen la obligación de velar por la integridad del patrimonio cultural catalán, y por la protección, conservación, acrecentamiento, difusión y fomento de este patrimonio. Hasta la actualidad, la Harinera de Castelló d'Empúries estaba incluida en el Catálogo de Bienes Protegidos del Plan de Ordenación Urbanística Municipal como bien inmueble integrante del patrimonio cultural de la villa. Con esta declaración se adelantará un grado más en la protección de la Farinera, que pasará a formar parte del Catálogo de Patrimoni Cultural Catalá.

La Farinera destaca no sólo por su valor histórico, sino también técnico. Los orígenes del edificio los encontramos en el molino del medio, molino medieval que se estableció en la ubicación actual en 1331 y que Pascual Madoz describe todavía en funcionamiento y en 1850, y del que comenta que tiene varias ruedas . A finales del siglo XIX, con la llegada de la industrialización, el viejo molino se convirtió en edificio de tres plantas, necesarias para acoger la moderna maquinaria del nuevo sistema productivo que llegaba de Europa, el sistema austrohúngaro. La Harinera de Castelló d'Empúries, en tanto que museo sección del Museo Nacional de la Ciencia y de la Técnica de Cataluña, es el testimonio de la evolución de la industria harinera en Cataluña y del gran cambio tecnológico que este sistema representó en la producción de harina durante la segunda mitad del siglo XIX.

Con el uso como museo que el Ayuntamiento de Castelló d'Empúries dio a La Farinera ya desde el momento de su adquisición, se aseguró que el uso al que se destina el bien garantiza su conservación.