La Fabrica de harina
La visita al Ecomuseu Farinera de Castelló d’Empúries consiste en un recorrido por la Farinera, un ejemplo de fábrica de harina que funcionaba con el sistema austrohúngaro, surgido en Budapest el año 1837 y que se extendió rápidamente por Europa, ya que se suponía grandes ventajas respecto a la molienda tradicional.
La exposición permanente incorpora toda una serie de soportes a la visita —maquetas, audiovisuales, muestras, entre otros— que permiten conocer de una forma amena y experimental los diferentes contenidos del museo.
En la aplicación del plan de contingencia del museo frente a la pandemia de la COVID-19, los elementos táctiles del museo están fuera de servicio.
De molino harinero a harinera
La Farinera se alza sobre el antiguo molino del Mig, uno de los tres molinos harineros que había en la villa medieval de Castelló d’Empúries. Su aspecto actual —un notable edificio de tres plantas— y la maquinaria que alberga son el resultado del proceso de industrialización que, a finales del s. XIX, supuso la transformación técnica y constructora del antiguo molino, convirtiéndose en una fábrica que renovó una parte de la maquinaria el año 1947.
El proceso productivo
La industrialización en el mundo harinero vino de la mano del sistema austrohúngaro, que suponía grandes ventajas respecto a los antiguos molinos, y que tuvo gran difusión por toda Europa, ya que por primera vez se podía obtener harina blanca.
Una de las peculiaridades de este complejo sistema es su verticalidad, gracias a la cual el trigo, la harina y los otros productos siguen un circuito que les conduce de una máquina a otra, en una continua subida y bajada de niveles para completar las tres fases del proceso:
- La limpieza, en la que se separan las impurezas del trigo.
- El acondicionamiento, que prepara el trigo para ser molido.
- La molienda propiamente dicha, en la que se muele el trigo y, poco a poco, se separa completamente la harina del salvado.
Agua y energía
Para hacer funcionar la maquinaria de este proceso, la Farinera utilizaba una turbina Francis del 1905 que transformaba la fuerza del agua en energía mecánica. Esta turbina, además, proporcionó la energía del primer alumbrado público de la villa de Castelló d’Empúries.
El agua se almacenaba en la balsa del «Rec del Molí», un canal de origen medieval que nace en el núcleo de Vilanova de la Muga y que recorre unos 5 km entre huertas, campos y cercados, configurando un paisaje cambiante y sorprendente que se vuelve excepcional cuando la acequia rodea Castelló d’Empúries y discurre por el antiguo cementerio de la muralla medieval.
Los campos y huertos que rodean la acequia desvían el agua para regar mediante unas pequeñas construcciones provistas de compuertas, conocidas popularmente como «boixes».
El trigo, la harina y el pan
El trigo es un de los cereales más importantes en la economía agrícola mundial, y Castelló d’Empúries fue una zona productiva muy importante de nuestra área, donde todavía hoy se cultiva trigo. La diversidad de variedades del cereal nos permite obtener distintos tipos de harina que nos servirán para hacer pan, pasteles, pizzas, galletas, etc.